El laboratorio AstraZeneca
admitió públicamente que su vacuna contra el COVID-19 podría tener como efecto
secundario la trombosis.
Ante los tribunales británicos, el
gigante farmacéutico dio a conocer que esta noticia, después de que múltiples
personas de Reino Unido demandaran a la compañía por los efectos adversos de
las inmunizaciones que se dieron durante la pandemia del 2020.
El laboratorio aclaró que se
trata de casos muy raros donde las personas pueden padecer el síndrome de
trombosis con trombocitopenia (TTS).
Tras dicha afirmación, la empresa
podría ofrecer una compensación de hasta 125 millones de dólares para los
demandantes.
La trombosis venosa profunda (TVP)
es una afección que ocurre cuando se forma un coágulo de sangre en una vena
profunda. Estos coágulos por lo general se forman en la parte inferior de las
piernas, los muslos o la pelvis, pero también pueden aparecer en el brazo.
La TVP puede afectar a cualquier
persona y causarle una enfermedad grave, una discapacidad y, en algunos casos,
la muerte.
Al respecto, las autoridades
sanitarias han indicado que nate cualquier síntoma se acuda al medico para su
valoración.